En Finlandia la ultraderecha consigue un gran éxito en las elecciones y se suma a la lista de países en los que ya están presentes (y creciendo) los radicales: Holanda, Austria, Francia, Dinamarca...
En España, la parte positiva es que los ultraderechistas son un tanto inútiles en su discurso y actos y siguen con simbología arcaica. La parte negativa es que los otros políticos se esfuerzan en parecer igual de inútiles.
Zapatero se va a China a pedir dinero. Dejemos de lado si lo podría haber hecho un poco antes, ya que la crisis no empezó ayer. Se va a ver a unos señores que incumplen sistemáticamente los derechos humanos y la libertad de expresión. Pero bueno, no dice nada de ello ya que: tienen dinero; son los propietarios de nuestra deuda pública; y a la gente, en general, no parece importarle demasiado (y como ejemplo tenemos el gran premio de Formula1 disputado ayer cerca de Shangai). Con estas, después de reunirse con ellos nos explica que van a salvar a nuestras Cajas y se congratula de su gran éxito. Cuando a los chinos les llegan las declaraciones hacen lo que mejor saben hacer: "censuran" las declaraciones de Zapatero y dicen que de salvar las Cajas ya hablaremos, con lo que Zapatero, de nuevo sin el dinero de los chinos, va a una conferencia justo antes de volverse para España pedir que cumplan los derechos humanos.
Paralelamente Aznar está en Estados Unidos dando clases a universitarios y soltando afirmaciones como que "Gaddafi es un amigo de occidente". Podría decirle esto a los familiares de los muertos occidentales por ataques terroristas del propio Gaddafi de hace unos años. Como a Aznar le gusta tanto defender a las víctimas del terrorismo... O sea, dice de un dictador que está luchando contra su propio pueblo con mercenarios y que en el pasado mató a occidentales inocentes que es un amigo; en cambio, en Euskadi hacen (él y sus amigos) que a los que buscan una salida democrática y pacífica al conflicto les sea imposible avanzar, por "respeto a las víctimas del terrorismo".
En la Eurocámara nuestros políticos votan en contra de reducir sus gastos con medidas como dejar de volar en primera clase. O sea, tenemos a estos señores en su cementerio de elefantes que son los únicos que no quieren sufrir ninguna de las consecuencias negativas de la crisis. Eso sí, hace pocos días el diario El País explicaba como muchos europarlamentarios se ausentan continuamente de la Eurocámara o no van más que para "fichar".
En España algo similar nos pasa con la Diputaciones, sean del color que sean los gobiernos nadie se las carga ni quiere cambiarlas. Son otro parking ideal para los políticos que han perdido sus sillas en Ayuntamientos y Comunidades Autónomas, y una plataforma fantástica desde la que incurrir en recurrentes delitos urbanísticos en algunas provincias.
Chacón parece sólo preocuparse por ser Presidenta. A sus vídeos/pantomimas guionizadas con los militares se suman sus declaraciones a lo San Pedro negando ser catalanista por eso del coste político.
En la Generalitat de Catalunya también han tenido ahora la ocurrencia de bajar los impuestos a los ricos para "evitar que prefieran pagar sus impuestos en otros sitios". O sea, para evitar que hagan lo mismo que muchos jugadores de la selección española, que declararon el ingreso de las primas que España les pagó por haber ganado el Mundial en Sudáfrica, donde las tasas de impuestos son más bajas, lo que no impidió que fueran recibidos como héroes en Madrid.
Volviendo a la medida de la Generalitat. Aunque sea poco lógico que los ricos paguen menos en porcentaje que la clase media, el motivo es que así podremos recaudar más, PERO la medida no entrará en vigor hasta que pase la crisis. En definitiva, no podemos bajar impuestos porque estamos en crisis, aunque el objetivo de la reducción sea recaudar más dinero. Muy buena medida.
Todavía más triste es que con las municipales a la vuelta de la esquina, todos los candidatos a alcalde se dediquen a hablar de macroeconomía y de recortes para salir en los medios en lugar de hablar de lo que harán ellos si ganan las elecciones.
De acuerdo que los ultraderechistas finlandeses tienen un discurso tendencioso, lleno de falsedades y de prejuicios. De acuerdo que sus políticas populistas difícilmente van a solucionar algo. De acuerdo que piensan más en lo que han hecho ellos por Europa que en lo que ha hecho Europa por ellos. Pero a pesar de todo esto, nosotros nos estamos esforzando en facilitar y dar argumentos a sus tesis con inutilidades a diestro y siniestro.
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